TESOROS DE LA BIBLIA, Semana 24 al 30 de Junio del 2024, Dios está de su parte

Discurso Preparados de TESOROS DE LA BIBLIA de esta Semana 24 al 30 de Junio del 2024, Dios está de su parte

Dios está de su parte (10 mins.)

¿Ha escuchado la expresión: "Si Dios está de nuestro lado, ¿quién puede estar en contra nuestra?"? Aunque es una frase común, no cabe duda de que es cierta; Jehová nos comprende mejor que nadie. Él conoce nuestros pensamientos y sentimientos, y desea cuidarnos y acompañarnos en los momentos difíciles.

En algún momento de nuestra vida, podríamos necesitar ayuda, especialmente para enfrentar los problemas que surgen. Si estos nos sobrevienen, no sería extraño que nos sintiéramos sumidos en la desesperanza. Podría parecer que la carga es más de lo que podemos soportar.

Un ejemplo es el siervo de Dios, David, quien confió en Jehová cuando tenía miedo. En una ocasión, David se refugió en los dominios de Akís, rey de la ciudad filistea de Gat, la misma ciudad donde había nacido Goliat. Los siervos del rey lo acusaron de ser un enemigo de la nación. ¿Qué hizo David en esa peligrosa situación? El Salmo 56, versículos del 1 al 4, nos lo revela.

VAMOS A LEER SALMOS 56:1-4.

Concédeme tu favor, oh, Dios, porque el hombre mortal me está atacando. Todo el día luchan contra mí y me oprimen. 2  Mis opositores se pasan el día atacándome; con arrogancia, muchos luchan contra mí. 3  Cuando tengo miedo, pongo mi confianza en ti. 4  En Dios —alabo su palabra—,En Dios pongo mi confianza; no tengo miedo.¿Qué puede hacerme un simple hombre?

Como vimos en la lectura, David oró fervientemente a Jehová, compartiendo sus miedos y sentimientos para escapar de su situación adversa. David tuvo que simular locura, pero estaba consciente de que su liberación venía de Jehová. Al bendecir sus acciones, David demostró su temor reverente y su profunda confianza en Dios.

Así como David, podemos mostrar nuestro temor a Dios confiando en su promesa de asistencia en tiempos difíciles. Por ejemplo, si nos diagnostican una enfermedad, inicialmente podríamos asustarnos, pero confiar en un buen médico nos tranquilizará.

Este médico podría haber tratado a muchos pacientes con la misma enfermedad y, al escucharnos atentamente, nos hace sentir comprendidos, ofreciéndonos un tratamiento que ha sido beneficioso para otros. De manera similar, nuestra confianza en Jehová se fortalece al recordar sus acciones pasadas, su intervención presente y sus promesas futuras.

David, al solicitar ayuda a Jehová, no se quedó inactivo; utilizó sus habilidades físicas y mentales para enfrentar el problema, reconociendo que no podemos depender solo de nuestras fuerzas. De igual manera, después de hacer todo lo posible, debemos confiar el resultado a Jehová. A menudo, confiar en él es lo único que podemos hacer. Es entonces cuando nuestro temor a Dios se vuelve más tangible, y las palabras de David en el Salmo 25:14, donde habla de la amistad íntima con Jehová reservada para quienes le temen, se vuelven especialmente consoladoras.

VAMOS A LEER SALMO 56:8.

Tú estás al tanto de mi vida errante. Recoge mis lágrimas en tu odre. ¿Acaso no están anotadas en tu libro?

Observamos que David aunque estaba triste y angustiado le implora a Dios su bondad y compasión diciendo: «Pon mis lágrimas en tu odre» Los odres eran recipientes muy comunes, en la época de David se fabricaban con la piel de una oveja o una cabra y se usaban para almacenar agua, aceite, vino o mantequilla, estos recipientes pueden albergar grandes cantidades de agua, según el tamaño del animal y son bien conocidos por su capacidad para mantener fresco el contenido incluso bajo el sofocante sol del desierto.

La conmovedora referencia de David a los odres significa mucho para todos nosotros, porque sabemos que Satanás controla el mundo y es común que las personas ,al igual que David sufran en sentido emocional, mental o físico, sobre todo si están tratando de agradar a Dios. Podemos confiar en que nuestro padre celestial no solo ve las pruebas que afrontamos, sino que también comprende cómo nos afectan emocionalmente.

Jehová entiende a la perfección nuestro sufrimiento, y movido por la compasión guarda en un odre simbólico todas las lágrimas que derramamos, pues no desea olvidar ninguna de ellas. Satanás sabe que valoramos mucho la vida, por eso asegura que estamos dispuestos a sacrificar cualquier cosa, incluso nuestra amistad con Jehová con tal de seguir vivos, pero que equivocado está, como él tiene los medios para causar la muerte, se aprovecha de nuestro miedo natural a morir con la intención de que le demos la espalda a Jehová.

A veces Satanás utiliza a algunas personas para que nos amenace y nos digan que si no renunciamos a nuestra fe, nos matarán o puede que se valga de una emergencia médica para que caigamos y le fallemos a Jehová tal vez los médicos o nuestros familiares no testigos nos presionen para que aceptemos una transfusión de sangre lo cual está en contra de la ley de Dios o quizás alguien trate de convencernos para que aceptemos un tratamiento que viola los principios bíblicos, pero podemos estar seguros de que Jehová está de nuestra parte y no permitirá que suframos ningún daño irreparable. Así lo expresó David en Salmo capítulo 56 versículo 9 al 13. Dice.

VAMOS A LEER SALMO 56:9-13.

El día en que supliqué ayuda, mis enemigos retrocederán. Tengo plena confianza en esto: Dios está de mi parte. 10  En Dios —alabo su palabra en Jehová alabo su palabra, 11  en Dios pongo mi confianza; no tengo miedo. ¿Qué puede hacerme un simple ser humano?

12  Estoy sujeto a los votos que te he hecho, oh, Dios. Te ofreceré expresiones de gratitud. 13  Porque tú me has salvado de la muerte y has impedido que mis pies tropiecen, para que yo ande delante de Dios en la luz de los vivos.

Al igual que David, debemos meditar en lo que Dios hará por nosotros en el futuro, porque es cierto que ninguno de nosotros quiere morir, pero sabemos que si perdiéramos la vida, Jehová seguiría amándonos. Los amigos de Jehová que mueren siguen vivos en la memoria de él, como si todavía existieran y él está deseando devolverles la vida. Jehová ha pagado un precio muy alto para que tengamos vida eterna, sabemos muy bien cuánto nos quiere y nos cuida, por eso cuando estamos enfermos o nos amenazan de muerte, no le damos la espalda, al contrario acudimos a él para que nos dé consuelo sabiduría y fuerzas.

En nuestra guía de actividades correspondiente a esta semana, podemos ver en la imagen a esta hermana se siente angustiada, por eso ora a Jehová desde el corazón. De igual manera, si estamos pasando por un mal momento, podemos orarle a Dios con todo nuestro corazón. Es cierto que Jehová no nos ha prometido que ahora viviremos una vida sin problemas, pero sea lo que sea que tengamos que pasar en este sistema Jehová ha prometido que en el nuevo mundo eliminará todos los problemas.

No debemos dudar nunca de que Jehová tiene el poder suficiente para resucitar a los marcos y no solo eso también curarnos y  eliminar a todos nuestros enemigos. Aunque, este mundo está lleno de cosas que nos asustan, nosotros debemos imitar y no dejar que el miedo nos paralice porque sabemos que Dios está de nuestra parte.